Qué es un repartidor de frenada
El repartidor de frenada del coche es un componente vital en el sistema de frenos de un vehículo. Su función principal es distribuir de manera equitativa la fuerza de frenado entre las ruedas delanteras y traseras. Cuando el repartidor de frenada está en buen estado, asegura que todas las ruedas frenen de manera uniforme, evitando así el desequilibrio que podría comprometer la seguridad y el rendimiento del coche.
Por qué es importante llevar los frenos compensados
Es importante que los frenos de un coche estén compensados para garantizar un frenado seguro y eficiente en diversas situaciones de conducción.
- Seguridad: Un sistema de frenos compensado asegura que todas las ruedas contribuyan de manera equitativa al proceso de frenado. Esto ayuda a evitar situaciones donde una rueda frena más que otra, lo que podría provocar desviaciones inesperadas del vehículo, pérdida de control y posibles accidentes.
- Estabilidad: El frenado descompensado puede causar desequilibrios en la distribución de peso del vehículo durante la frenada. Esto puede resultar en una pérdida de estabilidad direccional, especialmente en situaciones de emergencia o al tomar curvas a alta velocidad.
- Desgaste uniforme: Un sistema de frenos compensado ayuda a garantizar un desgaste uniforme de los componentes del sistema de frenos, como las pastillas de freno y los discos. Esto prolonga la vida útil de estos componentes y reduce la necesidad de mantenimiento frecuente.
- Distancia de frenado: Un frenado descompensado puede aumentar la distancia de frenado del vehículo, ya que una rueda que frena más que otra puede causar una disminución en la eficacia general del sistema de frenos. Esto aumenta el riesgo de colisiones, especialmente en situaciones de tráfico intenso o condiciones climáticas adversas.
Señales de un freno descompensado en el coche
- Tironeo o desviación del vehículo al frenar: Si notas que el coche tiende a tirar hacia un lado al frenar, puede ser un signo de que el repartidor de freno no está distribuyendo la fuerza de frenado de manera equitativa entre las ruedas.
- Bloqueo prematuro de una o más ruedas: Si una o más ruedas del coche se bloquean prematuramente durante la frenada, puede ser indicativo de un problema en el repartidor de freno. Esto puede causar un desgaste irregular de los neumáticos y reducir la eficacia del frenado.
- Luz de advertencia de frenos en el tablero: Algunos vehículos están equipados con sistemas de advertencia que pueden indicar problemas con el sistema de frenos, incluido el repartidor. Si se enciende la luz de advertencia de frenos en el tablero, es importante revisar el sistema de frenos de inmediato.
- Frenado desigual durante la conducción: Si notas que el frenado no es uniforme o que una rueda parece frenar más que las demás, puede ser un indicio de un problema con el repartidor de freno.
- Mayor distancia de frenado: Un repartidor de freno defectuoso puede provocar una mayor distancia de frenado, ya que no distribuye la fuerza de frenado de manera uniforme entre las ruedas.
Donde está situado el repartidor de frenos del coche
El repartidor de freno generalmente se encuentra ubicado en la parte trasera del vehículo, cerca del eje trasero o del sistema de frenos traseros. Su posición puede variar dependiendo del diseño específico del vehículo y del tipo de sistema de frenos que tenga.
En algunos coches, especialmente en aquellos con tracción delantera, el repartidor de freno puede estar integrado en el conjunto de la bomba de freno o en el sistema de frenos antibloqueo (ABS).
Algunos coches llevan un compensador incorporado en los cilindros de freno del freno trasero de tambor.
Es importante destacar que el repartidor de freno es parte del sistema de frenos y está conectado a otros componentes como las líneas de freno, las pinzas de freno y los cilindros maestros. Su ubicación estratégica permite que pueda regular la presión de frenado de manera efectiva entre las ruedas delanteras y traseras para mantener un frenado equilibrado y seguro.
El frenómetro y su importancia en la diagnosis de los frenos
Un frenómetro, también conocido como medidor de frenos, es una herramienta especializada utilizada en la diagnosis de los coches para evaluar la eficiencia y el equilibrio del sistema de frenado. Funciona midiendo la fuerza de frenado en cada rueda individualmente, permitiendo así detectar cualquier desequilibrio en la distribución de la fuerza de frenado entre las ruedas delanteras y traseras, así como entre las ruedas izquierda y derecha.
El funcionamiento básico de un frenómetro implica colocar el vehículo sobre una plataforma equipada con rodillos o dispositivos de medición de fuerza. Luego, el técnico aplica presión al pedal de freno del vehículo mientras las ruedas están en contacto con los rodillos del frenómetro. A medida que se aplica la fuerza de frenado, el frenómetro registra la cantidad de fuerza ejercida por cada rueda y muestra los resultados en una pantalla o impresión.
Algunos frenómetros también pueden realizar pruebas dinámicas, donde el vehículo se prueba en movimiento para simular condiciones de frenado realistas. Durante estas pruebas, el frenómetro mide la fuerza de frenado mientras el vehículo se desplaza a diferentes velocidades, lo que proporciona una evaluación más completa del sistema de frenos.
Diferencia entre línea PRE-ITV y frenómetro
El frenómetro es una máquina presente en los talleres mecánicos que detecta los desequilibrios entre las frenadas de las ruedas, para ello las comprueba de forma independiente.
Una linea pre-itv es también una máquina de taller, que incluye un frenómetro, además de otra serie de funciones como puede ser un banco de suspensión.
Ellas nos ayudan a detectar algún desajuste en los frenos, que podemos comprobar antes de ie a pasar la Inspección técnica obligatoria.
El papel del líquido de frenos del coche
El líquido de frenos desempeña un papel fundamental en el funcionamiento adecuado y la seguridad del sistema de frenos de un vehículo, de hecho es clave. ¿Por qué?
- Transferencia de Fuerza de Frenado: El líquido de frenos transmite la fuerza generada al presionar el pedal de freno desde el cilindro maestro a las pinzas o cilindros de freno en las ruedas. Este líquido actúa como un medio de transmisión hidráulica, convirtiendo la presión ejercida en el pedal de freno en fuerza mecánica para detener el vehículo.
- Punto de Ebullición Elevado: El líquido de frenos tiene un punto de ebullición alto para resistir las altas temperaturas generadas por la fricción durante la frenada. Esto evita que el líquido hierva y forme vapor.
- Absorción de Humedad: Aunque el líquido de frenos está diseñado para ser un fluido no compresible, con el tiempo puede absorber humedad del ambiente. Esto puede llevar a la formación de burbujas de vapor dentro del sistema de frenos.
- Corrosión y Degradación: La presencia de agua en el líquido de frenos puede causar corrosión en los componentes metálicos del sistema de frenos, como los cilindros maestros, las pinzas y los conductos de freno. Además, la contaminación del líquido de frenos con partículas y suciedad puede provocar su degradación y un funcionamiento deficiente del sistema de frenos.
- Purgado del Líquido de Frenos: El purgado del líquido de frenos es un procedimiento de mantenimiento que consiste en eliminar el líquido viejo y contaminado del sistema de frenos y reemplazarlo con líquido nuevo y limpio. Esto ayuda a eliminar la humedad y las impurezas del sistema, elimina el aire y las burbujas que pueda haber en el circuito, restaurando así la eficacia y la fiabilidad del frenado.